La frecuencia con la que limpie las rejillas depende de la frecuencia con la que ase a la parrilla, pero le aconsejamos que las limpie cada vez que utilice la barbacoa.
Precaliente la barbacoa a temperatura alta durante 15 minutos, con la tapa cerrada, y luego limpie las rejillas con un cepillo de acero inoxidable especializado.
Para una limpieza más a fondo, utilice nuestro limpiador de parrillas Weber, después de que la barbacoa se haya enfriado completamente.
Si las rejillas están oxidadas o quemadas, ¡es hora de cambiarlas!