Muchos propietarios de barbacoas están familiarizados con lo que se conoce como “cocción indirecta”. Es el método usado cuando quieres cocinar algo que requiere una menor temperatura y un mayor tiempo de cocción: lo que denominamos low‘n’slow.
Si estás habituado a cocinar en una barbacoa con tres quemadores o más y sueles usar el método de cocción indirecta, quizás te preguntes si es posible aplicar ese método en un modelo con 2 quemadores. La respuesta es que sí, y resulta muy sencillo.
En esta imagen te mostramos un modelo con 2 quemadores: el principio sigue siendo el mismo. Ajusta los quemadores exteriores a calor medio (o bajo); en este caso no hay ningún quemador central que debas apagar.
Para entender cómo cocinar mediante el método indirecto en una barbacoa con 2 quemadores, es importante fijarse en la posición de los tubos.
Una vez retiradas las rejillas de cocción y las barras Flavorizer, podemos ver que queda un espacio bastante amplio entre ambos quemadores: esa es la mejor zona para la cocción indirecta. El área resaltada muestra dónde deberías posicionar los alimentos para ello.
Con las rejillas y las barras Flavorizer colocadas de nuevo, es fácil visualizar dónde situar la comida.
No obstante, digamos que quieres preparar una pieza bastante grande como, por ejemplo, un pavo, y esa zona indirecta resulta demasiado estrecha para ello. ¿Qué hacer entonces? La respuesta también es muy sencilla.
En lugar de colocar los alimentos en el centro de la rejilla, apaga el quemador derecho y usa ese espacio como zona indirecta; ajusta el quemador izquierdo a calor medio o bajo dependiendo de lo que vayas a preparar.
Si se trata de algo muy grande, quizá debas darle la vuelta a la pieza a mitad del proceso de cocción para asegurarte de que se cocine uniformemente.
Si usas el método indirecto con asiduidad, puede que quieras darles la vuelta a las rejillas de cocción y a las barras Flavorizer de vez en cuando para que se desgasten uniformemente en lugar de trabajar siempre en el mismo lado.
Aplica estos consejos para preparar cualquier tipo de alimento, desde costillares de ternera a paletas de cerdo, pasando por pollos o pavos enteros.